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| Bonito dibujo de internet |
Últimamente se notaba extraña, veía algo qué la asustaba.
Un día... sombreándose los párpados vio como un ojo enorme dentro de su rostro la miraba, lo vio a través del pequeño espejito qué utilizaba para tal menester. Del susto, la cajita de sombra se le cayó al suelo rompiéndose y esparciendo su polvo de color malva por el mismo.
Al poco se acostumbró a vérselo, pero seguía con su miedo.
Cual fue su sorpresa cuando...
Se lo vio a otras personas, no muchas, e incluso a algún niño pequeño.
Algo dentro de ella le decía qué aquello no era malo, y se relajó empezando a verlo como un tremendo regalo qué todos no podían poseer.
Catalogó a las personas en dos grupos.
A las qué no les veía el ojo, las catalogó como personas materialistas qué les quedaba mucho por aprender en esta vida.
Las otras eran personas evolucionadas, qué habían venido a este mundo con una misión qué realizar. ¿Quizás, a ayudar a otras personas a encontrar su tercer ojo?
¿Y porqué no?
Es pura ficción, qué nadie piense lo contrario.
Autora Verónica O.M.