viernes, 18 de febrero de 2022

Otros tiempos capítulo n°19

 Y bla, bla, bla... durante un buen rato.

A José le apetecía el llegar a casa y no estar hablando con su patrón. O él era tonto... lo veía demasiado interesado en que Anita aceptase aquella proposición.

Se despidieron hasta el día siguiente. 

Y caminando hacia su hogar repasó mentalmente lo propuesto por don Federico y la forma. Y no le gustó.

Abrió la puerta y Amigo estaba tras ella esperándole para reclamar su dosis de atención y muestras de cariño.

Y como no... las recibió con creces.  José le pasó la mano por el lomo y él se dejó acariciar moviendo el rabo de puro contento.

Anita salía de la cocina y se secaba las manos en un trapo y después le besó en los labios.

-Cansado?

 Él contestó moviendo la cabeza. Y fué a asearse. Anita ya le tenía todo dispuesto, el agua caliente, jabón, toalla y la ropa que se pondría después.

Ya le diría... pensó que la dejaría elegir aunque a él no le gustase... 

Autora Verónica O.M. Continuará 


jueves, 17 de febrero de 2022

Otros tiempos capítulo n°18

 Federico pensó que no estaría nada mal quitarse de aquella obligación con su mujer y que hacía mal y de mala gana.

Su mente calenturienta empezó a imaginarse a otra mujer en la casa y que atendiese a Manolita y a él, pero de otra forma.

Las cosas que se hacen mal, mal acaban. 

Al parecer a él ni se le pasaba por la cabeza que pudiera ocurrir algo así. 

En la mente tenía a Anita, que le tenía en un sin vivir desde hacía un tiempo. 
A ella sí la respetaría y hasta se arrodillaría para suplicarle su  amor.

Y aquella idea fué creciendo en su cabeza y antes de que José acabara su jornada se vio diciendo esto:
-José tengo una propuesta que le podría interesar a tu mujer y a tí también. Un dinero extra siempre os vendrá bien...

José lo miró a los ojos y don Federico desvío los suyos y continúo intentando convencerle.
Autora Verónica O.M.
Continuará 

sábado, 5 de febrero de 2022

Otros tiempos capítulo n°17

 Odiaba estar todo el día en la cama y no poder hacer nada.

 Sus frecuentes golpes de tos y falta de aire la tenían en un estado deplorable. Y Federico apenas le prestaba atención y yo que he creado a estos personajes os confesaré un secreto. El hombre que no merece que le llame así... deseaba que un día al despertar se la encontrase que ya hubiese dado su último suspiro y quedar dueño de todo y no tener que soportar a aquella mujer a la que nunca había querido. 

Manolita había estado de él muy enamorada, pero, aquel inocente y bonito amor se fué transformando en una rutina difícil de soportar y más en su caso personal. 

De haber estado  rebosante de vida y en poco tiempo pasó a ser una impedida y se preguntaba el porqué de ello. 
Sospechaba que él tenía toda la culpa de lo que le sucedia...  

Pero a quien podía confesar sus sospechas? 

Parecía un pobre pajarillo enjaulado al que ni por caridad sacaban un ratito al aire y que le diese el sol

Era un mal hombre y no pudo haber elegido peor. 

Os adelanto que su suerte puede cambiar cuando otra persona entre en la casa. Y no os quepa duda que la Manolita débil y decepcionada se puede emponderar. Y aquí acabo por hoy. 
Autora Verónica O.M. 
Continuará